La Muñeca Negra de Mary Grueso: Contranarrativa, Resistencia y Representación (revisado por pares)
Este artículo fue sometido a un proceso de revisión por pares en el que todas las identidades eran visibles para editores, revisores y autores.
Escuché en vivo, por primera vez, a la poeta Mary Grueso Romero en el año 2020 en las series virtuales Aproximaciones Afrolatinaomericanas, un espacio de discusión sobre la historia, la literatura, y las artes afro latinoamericanas.1Este espacio lo fundé junto con dos profesores colombianos durante la pandemia. Hasta el momento hemos compartido diálogos con veintiséis participantes entre elles las poetas Ashanti Dinah Osorio, Lilia Ferrer; la novelista española Lucía Asué Mbomio Rubio, historiadores, músicos y profesores universitarios. La escritora leyó varios poemas, entre ellos el poema “Muñeca Negra” y “Si Dios hubiese Nacido aquí”. El poema “Si Dios hubiese Nacido aquí,” se ha convertido en un cántico de la resistencia a las imposiciones occidentales sobre la religión, el poder y la representación. En sus versos, Grueso se imagina a un Dios que nace en el Pacífico, es negro, pescador y agricultor. Se lo imagina comiendo chontaduro y borojó, un hombre… que baila currulao con marimba y guasá. Ese Dios, entendería en carne lo que es ser negro y pobre en el litoral.2Chontaduro es un fruto de la palmera amazónica de Sudamérica y Centroamérica. El borojó es una fruta que se cultiva en el Pacífico colombiano, conocida en Sudamérica por su aporte energético y su capacidad nutricional, algunos grupos indígenas y comunidades negras le atribuyen propiedades medicinales. El currulao es un género musical del pacífico, estrechamente relacionado con la cultura descendiente africana de la región. La marimba es un instrumento de percusión, que consiste en una serie de láminas de madera de distintos tamaños, dispuestas de mayor a menor, cada una con una altura de sonido diferente. En Colombia es un instrumento típico del contexto musical tradicional del Pacífico. En las riberas del río Guapi se elabora la marimba de modo artesanal. El guasá es un instrumento musical de percusión característico de Colombia y Ecuador, específicamente del litoral Pacífico sur y provincia de Esmeraldas. Es un sonajero, en el que el sonido se genera al sacudir el instrumento, causando el golpe de semillas en su interior con el armazón.
En este encuentro, Grueso habló de la importancia de la representación de la niñez negra en los textos estudiantiles y de la falta de escritura sobre la historia afrodescendiente en Colombia. Para ella no hay textos en donde aparecen representaciones e imágenes de niños afrodescendientes. La poeta menciona que sus cuentos y poemas han sido bien recibidos por el Ministerio de Educación y Cultura, pero que ha sido un camino arduo incluir esta nueva literatura en los colegios colombianos. Ella se ha movilizado en Colombia para que se incluyan temas afrodescendientes en los currículos académicos. Grueso menciona que cuando inició su enseñanza en colegios, encontraba representaciones de la afrodescendencia en libros de sociales, pero solamente para la celebración del día de la raza de Colombia el 12 de octubre. En las ilustraciones de dichos libros, solo aparecía la historia transatlántica e ilustraciones de afrocolombianos semidesnudos. De allí a que la poeta reitere que el reconocimiento institucional en la constitución colombiana de 1991 se dignifica a los grupos étnicos al reconocer sus derechos como personas. No obstante, todo ha quedado en el papel, puesto que, en el aula, dicha historia y enseñanza es nula. Es por eso, que la niñez y la identidad que se forma en la infancia son expresiones decisivas en la escritura y trabajo poético de Grueso. Para ella, el trabajo de formación en el aula es necesario para disipar la discriminación racial. Es en el aula, en sus palabras, en donde se inicia y enseña la exclusión racial.
Cuando hablo con la editora de Contours ArteCalle y me comenta que la segunda edición se centrará en fabricantes, coleccionistas, diseñadores y académiques de la muñeca negra, se vino a mi mente la conversación que tuve con Mary Grueso Romero en Aproximaciones. La poeta no solo escribe sobre la muñeca negra, sino que también crea su propia muñeca y viaja por Colombia, Latinoamérica y el Caribe para reflexionar sobre la importancia de la representación de las niñeces negras, es decir, que Grueso, mediante su escritura y muñeca de tela construye contranarrativas. Decidí hacerle una entrevista en el verano del 2023 e informarle que Contours le había extendido una invitación para participar en la primera Residencia de Investigación: La Muñeca Negra, programada para llevarse a cabo en La Habana, Cuba, en febrero de 2024.
¿Por qué Contranarrativas?: Punto de encuentro
Si bien Mary no pudo asistir a la Residencia en Cuba este año, hemos hablado mucho de cómo su trabajo es similar a las experiencias que fabricantes de muñecas afrocubanas, entre ellas, la famosa Margarita Montalvo y su familia. Margarita, directora del Proyecto Muñeca Negra en Cuba, ha impartido talleres y creado muñecas negras desde 1980. Grueso y la familia Montalvo son hacedoras de contranarrativas quienes usan como medio la tela, materiales reciclables para impartir talleres tanto a adolescentes como a adultos. Aunque este artículo no realizará un paralelo entre el proyecto de la familia Montalvo y Grueso, en este escrito me enfoco en las contranarrativas culturales, identitarias y educacionales que aparecen en la poética, narrativa y muñeca negra de tela de la poeta Mary Grueso. Propongo que dichas manifestaciones artísticas son actos de resistencia y respuesta al olvido y silenciamiento de las historias afrodescendientes en Colombia. Estudio contranarrativas como aquellas historias que detallan las experiencias y perspectivas de quienes han sido históricamente oprimidos, excluidos o silenciados en entornos educativos.3Ver definición propuesta de contranarrativa de Jenn K. Bergen, Sharissa Unger Hantke, Verna St. Denis en La Enciclopedia Internacional de Educación cuarta edición. Sin embargo, más allá de enfatizar la exclusión, me enfoco en los actos de resistencia que crean los oprimidos, excluidos o silenciados para responder a historias que los invisibilizan. Basado en esta definición, podríamos decir que el primer recuerdo de contranarrativa que evoca Grueso inicia en su infancia. Es en la niñez y las memorias de dicho periodo en su vida lo que regresa a su escritura y a la elaboración de las muñecas de tela de la poeta. Grueso utiliza su poesía, historias de infancias y muñecas negras para responderle a una nación, que, de manera insuficiente, ha representado histórica o literariamente a los afrocolombianos. La muñeca negra de tela creada por Grueso es una transición creativa que inicia con la escritura del poema “Muñeca Negra” en el poemario El otro yo que sí soy yo, poemas de amor y mar (1997), el cuento La muñeca negra (2011) y se exterioriza en la tela y la elaboración familiar de las muñecas concebidas e imaginadas por la escritora y su familia.
En la escritura y en la muñeca de tela de Mary Grueso, la poeta desea enfatizar la falta de representación en la industria de las muñecas en Colombia cuando era una niña. Sin embargo, esta carencia hizo posible, según Grueso, que la imaginación de padres e hijos en el litoral reinventasen muñecas hechas de pan y plátano que eran y son parte del ritual del bautizo católico impuesto durante la colonización española en Colombia en el siglo XIV. Se entiende que después del bautizo, se recibe al Espíritu Santo a través de la inmersión en el agua. Después del ritual, hay una cena, en donde se bendicen el pan y el agua y se reparten a la congregación. El pan representa el cuerpo, y el agua la sangre. Así, la fabricación de la muñeca, más que una reproducción del pasado es y seguirá siendo un acto de formación de comunidad que imparte conocimientos ancestrales. Grueso, como también lo hicieron y hacen muchas familias en el Pacífico, transforman el ritual y legado del catolicismo y le ofrecen un nuevo valor protocolario y ancestral. Este acto ofrece una respuesta a la imposición de saberes culturales, y se convierte en sincretismo religioso, no obstante, este acto va más allá de la composición o mezclas de costumbres tradicionales. Lo que Grueso enfatiza es la resignificación de un ritual y la respuesta a la omisión de las carencias de la representación visual en la niñez afrodescendiente.
Contranarrativa cultural e identitaria: ¿Quién es Mary Grueso Romero?
Mary Grueso Romero nació en el corregimiento de Chuare Napi, en Cauca. Es una de las figuras intelectuales más relevantes e importantes del Pacífico colombiano, considerada una de las mejores poetas afrocolombianas debido a su trabajo y propuesta reivindicatoria de su raza, identidad, lucha libertaria y legado ancestral. Ha incursionado en varios campos narrativos: romántica y erótica para después adentrarse en la poesía social y finalmente, en la literatura infantil. Grueso es especialista en enseñanza de la literatura, maestra de bachiller de la Escuela Normal Nacional de Guapi. Ha enseñado en la Universidad del Valle, Universidad Libre y Universidad del Pacífico. Cuenta con quince libros de poesía y nueve de literatura infantil. Entre los más destacados, Del baúl a la escuela (2004), Negra soy (2008), Tómame antes que la noche llegue (2009), Cuando los ancestros llaman (2009), La cucarachita mandinga (2017).
Grueso considera que su poesía no solo es apreciada y leída en Colombia sino en las Américas, ya que recuerda, con particularidad su encuentro con el premio Nobel de Literatura Derek Walcott, quien le dijo, después de escuchar sus versos, que ella era “la gran poeta.” Grueso, quien es una admiradora del poeta caribeño de la isla de Santa Lucía, recibe con halago dicha afirmación, reconociendo que sus letras y voz producen un efecto transformador en el oyente y en su lector. Sin embargo, lo que más se destaca en la poeta es la contranarrativa que logra a través de la resignificación que hace de lo negro en su escritura. Dicha resignificación de lo negro en sus poemas lo logra a partir de la descripción de diferentes miradas; una de ellas, como asegura Paula Cuero Valencia, es dibujando la cotidianidad de los habitantes del Pacífico, “sin burlas, pero sí exhortando a aquellos que con su manera de proceder siguen ofreciendo argumentos para que la sociedad los censure y satirice.” (59) También resignifica lo negro en la exaltación de los elementos de su cultura regional y su herencia africana entre ellos: los cantos, arrullos y alabaos que hacen parte de la oralidad de su región.
La poeta escribe, desde la periferia, sobre la ancestralidad, la oralidad, el despojo y violencia en Colombia, la niñez y las tradiciones del Pacífico. El pacífico colombiano es una de las seis regiones naturales del país. Comprende parte del departamento de Chocó, las zonas costeras del Valle del Cauca, Cauca y Nariño. La región del Pacífico se caracteriza frecuentemente también por la predominancia de poblaciones afrodescendientes negras (entre el 92% y el 96%). Se le considera, en el imaginario social y político como la “región negra” por antonomasia en Colombia (190 Eduardo Restrepo).4Ver Restrepo, Eduardo (2016). Espacialidades afrodescendientes en el Pacífico colombiano. En Liberac, Antonio Territórios de gente Negra: processos, transformações e adaptações: ensaios sobre Colômbia e Brasil. Cruz das Almas (Brasil): EDUFRB. Por muchos años ha sido una región explotada, saqueada y marginada por empresas nacionales y extranjeras. Sin embargo, como menciona Nelly Mercedes Prado Paredes en el libro Orígenes de los versos para enamorar: oralidad del Pacífico sur de Colombia, “El carácter sociológicamente marginal de los territorios que conforman el Pacífico colombiano, ha permitido la creación y el mantenimiento de una tradición propia que no ha sido suficientemente explorada y recreada…Todo este espacio es una historia colectiva de multísonas voces” (192). En su extensa obra poética, Grueso no solo describe el imaginario social del Pacífico, su marginalización y saqueos, sino también la fuerza y conocimiento de las voces colectivas, tradiciones y riquezas naturales de esta región.
Contranarrativa poética y narrativa: Inicios de la muñeca negra
Cuando le pregunto a Mary Grueso Romero sobre su decisión de escribir y crear muñecas negras, ella contesta que esta escritura nace de las memorias sobre su infancia, puesto que en la infancia se siente la necesidad de tener juguetes con quienes, intrínsicamente, terminamos sintiéndonos identificados. Sin embargo, ella recuerda que en el Pacífico no existían juguetes, específicamente muñecas, que tuvieran su color de piel. Para Grueso, la creación de las muñecas es una resistencia al vacío de no poder tener un juguete como la muñeca ya que es un objeto significativo para la representación y símbolo de la identidad en la infancia.
Grueso cuenta que en el mercado solo había acceso a muñecas de plástico que se producen en cantidad, por lo general, blancas y con ojos azules. Dicha apreciación la confirma Betty Osorio, quien señala que, “En el mercado de juguetes, las muñecas más solicitadas son las rubias, blancas, mientras que las muñecas negras tienen más estatus como artesanías y funcionan como adornos folclóricos” (158). Cabe aclarar que estas muñecas no eran las originales, sino una imitación de la muñeca de Mattel, es decir, unas barbies hechas de un plástico blando, amarillo y traslúcido.5 No se encuentran en línea fotografías de las muñecas imitación barbie que venden en algunas partes en Colombia. La poeta hizo parte de la niñez que deseaba una muñeca negra como ella, que tuviera el mismo color de sus ojos. Es así como Grueso reconoce el rol de los adultos, en especial mujeres, quienes reinventaron muñecas hechas de pan y hoja de plátano, a los que le ponían tela y ojos que semejaran el cuerpo y ciertos rasgos humanos. La importancia de estas muñecas de pan y plátano es que su creación está sujeta al ritual del bautizo católico, en donde se les mojaba la “cabeza” con agua de socorro (agua del río). En este ritual se rezan tres padres nuestros para después asignarle un nombre, que después se divide y se comparte, mientras se repite: “María corcoma yo te bautizo y yo te coma.” Este ritual hoy lo practica Grueso en sus talleres sobre la creación de la muñeca negra en el Cauca, Cali, Bogotá y Cartagena.
Estas memorias y legado cultural, narradas desde la oralidad, aparecen por primera vez en el poemario El otro yo que si soy yo: poemas de amor y mar, bajo el nombre “Muñeca negra.” En el poema se lee:
Le pedí a Dios una muñeca
pero no me la mandó;
se la pedí tanto, tanto,
pero de mí no se acordó.
Se la pedí a mi mamá
y me dijo: “pedísela duro a Dios”,
y me jinqué de rodillas
pero a mí no me escuchó.
Se la pedía de mañanita
antes de rayar el sol
para que así tempranito
me oyera primero a yo.
Quería una muñeca
que fuera como yo:
con ojos de chocolate
y la piel como un carbón.
Y cuando le dije a mi taita
lo que estaba pidiendo yo
me dijo que muñeca Negra
del cielo no manda Dios;
“búscate un pedazo’e trapo
y hacé tu muñeca vo”.
Yo muy tristecita
me fui a llorá a un rincón
porque quería una muñeca
que fuera de mi color.
Mi mamá muy angustiada,
de mí se apiadó
y me hizo una muñeca
oscurita como yo. (50)
El poema hace posible que el lector sea partícipe del imaginario de la niña que desea ser representada, poder ver su piel y ojos reflejados en la muñeca/objeto que reclama. Sin embargo, aunque en este poema oral se enfatizan ideales de personificación y belleza, quiero destacar cómo también se resalta la relación y comunicación entre la niña y su madre. Esta relación, como menciona Orozco, acentúa el papel central que tienen las mujeres negras en el Pacífico colombiano (157). Este vínculo también se exterioriza en la manera en que la madre utiliza trapos o telas para crear la muñeca a su hija, práctica similar a las muñecas de Abayomí brasileñas.6Podría decirse que la introducción de las muñecas negras en Latinoamérica y el Caribe inicia mediante la elaboración de la muñeca Abayomí. Según Alicia Castillo Lasprilla, la historia de la muñeca negra data de las mujeres esclavizadas traídas de África a América en los barcos negreros. En esta travesía las mujeres “rasgaban sus túnicas y elaboraban muñecos de nudos para mitigar el dolor de sus hijos e hijas.” Es en 1988, durante la celebración de los cien años de la abolición de la esclavitud en Brasil, que Lena Martins (artesana, educadora popular y militante del movimiento de Mujeres Negras de Brasil), da inicio a la muñeca Abayomi, que en yoruba significa “encuentro precioso” o “el que trae alegría”. Para Castillo, es a través de intercambios culturales entre la muñeca Abayomí de Brasil y otros países latinoamericanos, que se resignifica su valor identitario. Así, el poema de Grueso se convierte en un llamado a la resistencia y a la transmisión de conocimiento femenino. Es importante rescatar que lo que acentúa el poema es la voz de la niña sin ningún tipo de intervención, rescatándose así, su oralidad. Teniendo en cuenta que la oralidad es un modo de “producción de conocimiento que proyecta ideales culturales,”7Ver Voces de la resistencia, traducido por José F. Buñuelos y Sally Perret. notamos que esta producción cultural en la narrativa de Grueso aparece a lo largo de toda su obra. En este caso lo experimentamos en el poema “Muñeca negra” y se extiende la escritura del cuento “La muñeca negra.”
En el cuento “La muñeca negra” se narra la historia de una niña que vivía junto a sus padres en una casa de palafito, sus actividades diarias e interacción con el mar. Ella observa las olas que chocan con los manglares en la distancia, los caracoles y los caballitos de mar que la rodean. La niña del cuento evoca que unos años atrás, su madre le regalaba las hojas de plátano o “pachas” para que jugara con ella, puesto que “las niñas negras no tenían muñecas para jugar.” (6) A esta pacha de plátano se le bautizaba, asaba en el fogón de leña y repartía entre las personas que estaban reunidas. La niña crece y se da cuenta que nunca ha tenido una muñeca que se pareciese a ella. En una conversación que tiene la niña con su madre, le pide una muñeca de verdad, que tuviera su color, ojos chocolate y “la piel como un carbón.” (11) La madre, al ver la tristeza de su hija, le cose una muñeca de trapo que ensambla con una tela y botones de color café. La niña, finalmente, canta y danza mientras sostiene su muñeca negra.
En esta historia, Grueso hace énfasis en la belleza, a la apreciación del color brillante de la piel negra, la naturaleza, la oralidad y la conexión madre e hija. Existe en la narrativa del cuento una valoración y paralelo entre la belleza de la niña y la sublimidad de su entorno. Así que, el cuento es una oda al Pacífico colombiano en donde la naturaleza y la gallardía de sus habitantes son indivisibles. Ese paralelo es introducido mediante el rescate de la oralidad. Tanto el cuento como el poema están narrados mediante el uso del habla cotidiana de los personajes, evidenciando las prácticas culturales, memorias y apreciaciones de la poeta. Dichas memorias son descritas mediante la exaltación de las experiencias de la infancia y el vínculo materno. La poeta describe esta proximidad fraternal para rescatar y evidenciar historias íntimas que antes no se habían contado en la narrativa infantil en Colombia.
En Colombia, antes de la “La muñeca negra” no existía un cuento que tuviera como personaje principal a una niña afrodescendiente, a diferencia de otros países como Brasil que ya tenía Niña bonita (1986) de Ana María Machado.8El cuento de Machado narra las peripecias de un conejo blanco que admira y quiere ser como la niña de ojos de aceitunas, cabello rizado y piel negra oscura y lustrosa. El tema central del cuento Machado es la belleza e identidad de la niña negra. Personajes afrodescendientes femeninos han aparecido en novelas canónicas como es el caso de Nay en María (1867) de Jorge Isaacs.9Nay es una esclava traída de Gambia, de la nación de Achanti en la novela de Isaacs. Nay es quien cuida de María, el personaje principal de la novela homónima. Sin embargo, los personajes no son protagónicos, sino que aparecen en ciertos capítulos para hablar del imaginario nacional colombiano. Por otro lado, las novelas que hablan de la afrodescendencia han sido protagonizados por personajes masculinos, como es el caso de Oscar Collazos, Helcías Martán Góngora, Arnoldo Palacios, Rogerio Velásquez, Candelario Obeso, entre otros. Aunque dichos personajes, retratan problemáticas de explotación, violencia, racismo y escasez de las poblaciones afrodescendientes, la mujer y la infancia no aparecen como eje central narrativo.10Ver Biblioteca de literatura afrocolombiana la cual contiene 18 títulos y un ensayo escrito por autores Afrocolombianos/as destacados en los últimos 200 años: https://www.banrepcultural.org/proyectos/afrocolombianidad/biblioteca-de-literatura-afrocolombiana De allí a que tanto el poema como el cuento de Grueso se convierta en un hito y referente de la literatura infantil afrodescendiente, el cual ha sido considerado un libro revolucionario porque crea una contranarrativa a la escritura canónica nacional colombiana.
La historia que aparece en “La muñeca negra,” no solo ofrece más detalles sobre el origen de la muñeca negra de tela, pero es, desde las primeras líneas, una oda a la identidad de los habitantes del Pacífico, especialmente a la identidad de la mujer del litoral.11Cabe destacar el trabajo de poetas tales como María Teresa Ramírez, María Elcina Valencia y Lucrecia Panchano, entre otras, quienes le da la voz a la mujer afrosdencendiente en Colombia, cuyos versos, también le han dado paso a las descripciones de la mujeres en el imaginario de nación colombiana. Ahora bien, ¿Cómo nace la muñeca negra y cómo se presenta el traspaso de la narración oral a la creación de la muñeca de tela? ¿Es la muñeca negra de tela también un dispositivo de contranarrativa?
Creación de la Muñeca negra: Contranarrativa comunitaria y educacional
En Colombia, la etnoeducación aparece por primera vez en el Artículo 23 de la Ley 115 de 1994 que establece la obligatoriedad de la Cátedra de Estudios Afrocolombianos, como parte del área de sociales, sin embargo, Fabio Alberto García Araque afirma que:
No hay una sola entidad dentro del Ministerio que atienda el tema de los estudios afrocolombianos y la etnoeducación. El enfoque afrocolombiano debe ser transversal en todas las direcciones del Ministerio de Educación, porque la introducción de los estudios de la etnoeducación requiere que cada grupo, que cada dirección reconozca la afrocolombianidad. (13)
Grueso reconoce el trabajo que se está realizando en Colombia sobre la etnoeducación y sugiere que hay que ser partícipe de su propia cultura pluricultural. Una manera de fomentar la etnoeducación es educar a futuros educadores en la historia de patrimonios e historia del pacífico. Ahora bien, en Colombia hay una carencia de textos que exponen la historia afrodescendiente y lo que comúnmente se enseña, es un currículo o lecturas en la que no aparece la historia afrodescendiente y si se menciona, se hace y narra victimizado.12Esta literatura canónica inicia con las Crónicas de Indias, pasando por la literatura costumbrista, el romanticismo, el simbolismo con Rafael Pombo, Jorge Isaacs, Eustaquio Palacios, entre otros. En los estudios literarios se enfatiza el nadaísmo, la generación Golpe de dados, representada por Raúl Gómez Jattin, terminando con el Grupo de Barranquilla, encabezado por Gabriel García Márquez, entre otros.
Grueso decide alejarse de dicha narrativa victimizada para incorporar relatos más íntegros y completos de su cultura donde los protagonistas sean conscientes de su identidad e historia. Además de la falta de literatura y escritura que resalte los valores y cultura afrocolombiana, también hay una representación de la niñez inexistente. Por esta razón, Grueso decide escribir literatura infantil. Sus cuentos se enfocan en las vivencias infantiles que interrogan y afirman su identidad. Varios de sus cuentos, señala Grueso, narran las historias de sus estudiantes. Por ejemplo, en el cuento La niña del espejo (2019), la poeta escribe sobre Alba Rocío, una de sus estudiantes. El cuento, en palabras de Grueso, habla de “una niña que se autorreconoce negra y bella al mirarse al espejo”. En La niña del espejo, también se expone la relación que tienen los habitantes del Pacífico con la naturaleza y cómo viven en comunión con ella. En este cuento, también aparecen otras temáticas como la exaltación de la belleza de la niñez afrodescendiente, el barrio San José, “en contraste con la moderna arquitectura de la bahía de Buenaventura, y los pescadores que buscan el sustento diario” (26).
Grueso empieza a crear muñecas negras en el 2012, cuando le piden muñecas en encargo, es decir, después de que contara en su escritura su deseo que tuvo desde niña de tener una muñeca que tuviera el color del carbón. A ella le regalaban muñecas y sábanas con instrucciones en donde aparecía la historia narrada de su muñeca negra. Le enviaron muñecas de Brasil y de varias partes de Latinoamérica. El acto de recibir muñecas hace que Grueso empiece a hacerlas junto con su familia. Empezó con muñecas grises y ahora incluye colores miel y café. La escritora compra las telas, su yerno le pinta los ojos y su hija las cose a mano, y les pone las trenzas parecidas a las trenzas de Grueso. Los vestidos los manda a hacer. Al inicio Grueso y su familia creaban muñecas de tamaño mediado y ahora hacen muñecas que son articuladas, más grandes que se pueden mover y sentar. A estas muñecas la poeta les llama “gateadoras” que son cuatro veces el tamaño de las muñecas negras con las que empezó. Grueso describe este acto de creación de muñecas como un proyecto familiar y comunitario.
La elaboración de las muñecas ha tenido una profunda recepción en colegios, en donde se ha generado un movimiento colectivo y contranarrativa educacional, en el que los padres de familia, en los colegios que visita, también se involucran en el proceso de compra y divulgación. La poeta ahora quiere que no se tenga en cuenta el color, sino que sus muñecas hagan parte de la industria de juguetes, es decir, una industria en la que se normalice el color y se venda como cualquier otro juguete. Junto con sus libros, la escritora tiene encargos constantes de muñecas en Colombia y las ha llevado a Madrid en la Feria del Libro, a Brasil, Estados Unidos, Costa Rica, México, Venezuela y Cuba. En estos viajes también hay un intercambio de conocimiento, en donde le preguntan sobre el proceso e importancia de la creación de la muñeca negra.
Actualmente, la poeta dicta talleres en la Pedagógica de Bogotá, en la Universidad del Cauca a estudiantes de Etnoeducación y Educación en el interior de Bogotá y en el Valle del Cauca. Sus talleres duran tres días, y participan hombres y mujeres con la intención de aprender a hacer las muñecas que Grueso ensambla. La poeta les recuerda que no necesariamente se deben comercializar, sino que puede ser un regalo para sus hijos. Estos talleres, generan intercambios y hermandades. Del mismo modo, los talleres también generan espacios para clamar arrullos del pacífico. Grueso narra que en una ocasión fue invitada a Medellín y llevó la muñeca de pan a un encuentro de profesores realizado por la Gobernación y el director de las negritudes. Con los pedagogos hablaron de la educación y con el pan, hicieron el bautizo con agua en la cabeza, y cantaron al unísono el arrullo: “Señores vengo de cielo, María como quedó/ Señores vengo de cielo, María como quedó/ María quedó muy buena y saludos le mandó y saludes le mandó”.13Como recopila César Alberto Córdoba Gutiérrez en “Arrullo del Pacífico Colombiano: Un fenómeno cultural, espiritual, musical y social”:
“El arrullo como canto de carácter religioso es un canto que se presenta en ciertas celebraciones como lo son Navidad, la fiesta patronal o el día del santo y las exequias. Estas celebraciones cubren etapas de la vida específicas: la Navidad representa el nacimiento, donde se ve reflejada la infancia; en las fiestas patronales se ve la vida en general; las exequias que, claro, representan la partida de este mundo… En el Chocó son cantos totalmente originales donde se hace alusión a la Virgen y al niño con canciones como “Ay ve”, un canto donde Jesús es el principal protagonista…Allí el niño aprende a reconocer las deidades que guiarán su patrón de conducta en el resto de su vida, y a familiarizarse con los santos a los que se encomiendan a diario sus padres” (62). Queda claro que con estos talleres Grueso genera un intercambio cultural, social y fraternal.
Conclusiones: Vuelvo a la familia Montalvo
Para Grueso la memoria es parte importante de su acervo cultural, pero también reconoce que para las comunidades negras la oralidad es la columna vertebral. Así, la poesía se convierte en una herramienta de desahogo, que representa al mar y a su gente. La muñeca de tela es una extensión de su escritura que transmite no solo un deseo individual sino valores colectivos. La muñeca, es también una herramienta de la etnoeducación en Colombia, una respuesta a la invisibilidad del afrocolombiano, de su historia, oralidad y cultura. Elaborar muñecas negras es un acto de resiliencia ante ideas de mestizaje en Colombia, legado colonial en Latinoamérica, que exalta la blanquitud y niega racismos sistémicos y estructurales hacia los afrodescendientes en el imaginario de nación.14Hablando del mestizaje en su libro Raza y Etnicidad en Latinoamérica (2000), Peter Wade define mestizaje como la mezcla sexual y espacial de los pueblos en las Américas entre españoles, criollos, indígenas y negros libres (38). Sin embargo, Wade también menciona que los afrodescendientes, “sufren exclusión cuando los blancos y mestizos los definen como más allá de los límites de una legítima nacionalidad, como no nacionales, distantes de los valores básicos que implica el ser blanco o mestizos (de color claro), urbanos, civilizados y con una educación formal” (103).
Cuando vuelvo de la residencia de investigación en Cuba, me doy cuenta de que la fabricación de muñecas se convierte en un mecanismo de resistencia y empoderamiento femenino. Pienso que Mary (como ahora la llamo), debe conocer a Margarita, a su familia, a la historia detrás de sus talleres y quizás fomentar diálogos e intercambios transnacionales de resistencia.
Bibliografía
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Bergen, Jenn K., et al. “Contemporary challenges and approaches in anti-racist teacher education.” Elsevier, 18 Nov. 2022, www.sciencedirect.com/topics/social-sciences/counter-narratives.
“Biblioteca de literatura afrocolombiana.” https://www.banrepcultural.org/proyectos/afrocolombianidad/biblioteca-de-literatura-afrocolombiana, www.banrepcultural.org/proyectos/afrocolombianidad/biblioteca-de-literatura-afrocolombiana. Acceso 27 Sep. 2023.
Buñuelos, José F y Perret, Sally. Voces de la resistencia. Editorial Ultramarina, 2021.
“Cocorobé cantos y arrullos del Pacífico colombiano.” https://babel.banrepcultural.org/digital/collection/p17054coll3/id/27/, babel.banrepcultural.org/digital/collection/p17054coll3/id/27. Acceso 27 Sep. 2023.
Córdoba Gutiérrez, César Alberto. “Arrullo del pacífico colombiano un fenómeno cultural, espiritual, musical, y social.” Dialnet, no. 7, 2012, pp. 56-69.
Grueso Romero, Mary. Cuando los ancestros llamas: Poesía afrocolombiana. Editorial Universidad del Cauca, 2020.
———————. La muñeca negra. Apidama Ediciones, 2021.
———————. La niña en el espejo. Apidama Ediciones, 2019.
García Araque, Fabio Alberto. “La etnoeducación como elemento fundamental en las comunidades afrocolombianas”. Diálogos sobre la educación, no. 15, 2017.
Machado, Ana María. Niña Bonita. Kane/Miller Book Publisher, 1996.
Osorio, Betty. “Construcción estratégica de la alteridad negra en tres cuentos de Mary Grueso”. Revista de Crítica literaria Latinoamericana, no. 18, 2014, pp.149-161.
Restrepo, Eduardo. “Espacialidades afrodescendientes en el Pacífico colombiano.” Territórios de gente negra: processos, transformações e adaptações : ensaios sobre Colômbia e Brasil, UFRB, 2016.
Wade, Peter. Raza y Etnicidad en Latinoamérica. Abya – Yala, 2000.
La Dra. Ángela Castro es profesora asistente en el Departamento de Español y Portugués de Colorado College. Su investigación se centra en las representaciones predominantes de la escritura femenina afrocaribeña del siglo XX. Cofundó “Aproximaciones Afrolatinoamericanas”, un espacio virtual que cuestiona y examina la historia, la literatura y el arte afrolatinoamericanos.
- 1Este espacio lo fundé junto con dos profesores colombianos durante la pandemia. Hasta el momento hemos compartido diálogos con veintiséis participantes entre elles las poetas Ashanti Dinah Osorio, Lilia Ferrer; la novelista española Lucía Asué Mbomio Rubio, historiadores, músicos y profesores universitarios.
- 2Chontaduro es un fruto de la palmera amazónica de Sudamérica y Centroamérica. El borojó es una fruta que se cultiva en el Pacífico colombiano, conocida en Sudamérica por su aporte energético y su capacidad nutricional, algunos grupos indígenas y comunidades negras le atribuyen propiedades medicinales. El currulao es un género musical del pacífico, estrechamente relacionado con la cultura descendiente africana de la región. La marimba es un instrumento de percusión, que consiste en una serie de láminas de madera de distintos tamaños, dispuestas de mayor a menor, cada una con una altura de sonido diferente. En Colombia es un instrumento típico del contexto musical tradicional del Pacífico. En las riberas del río Guapi se elabora la marimba de modo artesanal. El guasá es un instrumento musical de percusión característico de Colombia y Ecuador, específicamente del litoral Pacífico sur y provincia de Esmeraldas. Es un sonajero, en el que el sonido se genera al sacudir el instrumento, causando el golpe de semillas en su interior con el armazón.
- 3Ver definición propuesta de contranarrativa de Jenn K. Bergen, Sharissa Unger Hantke, Verna St. Denis en La Enciclopedia Internacional de Educación cuarta edición.
- 4Ver Restrepo, Eduardo (2016). Espacialidades afrodescendientes en el Pacífico colombiano. En Liberac, Antonio Territórios de gente Negra: processos, transformações e adaptações: ensaios sobre Colômbia e Brasil. Cruz das Almas (Brasil): EDUFRB.
- 5No se encuentran en línea fotografías de las muñecas imitación barbie que venden en algunas partes en Colombia.
- 6Podría decirse que la introducción de las muñecas negras en Latinoamérica y el Caribe inicia mediante la elaboración de la muñeca Abayomí. Según Alicia Castillo Lasprilla, la historia de la muñeca negra data de las mujeres esclavizadas traídas de África a América en los barcos negreros. En esta travesía las mujeres “rasgaban sus túnicas y elaboraban muñecos de nudos para mitigar el dolor de sus hijos e hijas.” Es en 1988, durante la celebración de los cien años de la abolición de la esclavitud en Brasil, que Lena Martins (artesana, educadora popular y militante del movimiento de Mujeres Negras de Brasil), da inicio a la muñeca Abayomi, que en yoruba significa “encuentro precioso” o “el que trae alegría”. Para Castillo, es a través de intercambios culturales entre la muñeca Abayomí de Brasil y otros países latinoamericanos, que se resignifica su valor identitario.
- 7Ver Voces de la resistencia, traducido por José F. Buñuelos y Sally Perret.
- 8El cuento de Machado narra las peripecias de un conejo blanco que admira y quiere ser como la niña de ojos de aceitunas, cabello rizado y piel negra oscura y lustrosa. El tema central del cuento Machado es la belleza e identidad de la niña negra.
- 9Nay es una esclava traída de Gambia, de la nación de Achanti en la novela de Isaacs. Nay es quien cuida de María, el personaje principal de la novela homónima.
- 10Ver Biblioteca de literatura afrocolombiana la cual contiene 18 títulos y un ensayo escrito por autores Afrocolombianos/as destacados en los últimos 200 años: https://www.banrepcultural.org/proyectos/afrocolombianidad/biblioteca-de-literatura-afrocolombiana
- 11Cabe destacar el trabajo de poetas tales como María Teresa Ramírez, María Elcina Valencia y Lucrecia Panchano, entre otras, quienes le da la voz a la mujer afrosdencendiente en Colombia, cuyos versos, también le han dado paso a las descripciones de la mujeres en el imaginario de nación colombiana.
- 12Esta literatura canónica inicia con las Crónicas de Indias, pasando por la literatura costumbrista, el romanticismo, el simbolismo con Rafael Pombo, Jorge Isaacs, Eustaquio Palacios, entre otros. En los estudios literarios se enfatiza el nadaísmo, la generación Golpe de dados, representada por Raúl Gómez Jattin, terminando con el Grupo de Barranquilla, encabezado por Gabriel García Márquez, entre otros.
- 13Como recopila César Alberto Córdoba Gutiérrez en “Arrullo del Pacífico Colombiano: Un fenómeno cultural, espiritual, musical y social”:
“El arrullo como canto de carácter religioso es un canto que se presenta en ciertas celebraciones como lo son Navidad, la fiesta patronal o el día del santo y las exequias. Estas celebraciones cubren etapas de la vida específicas: la Navidad representa el nacimiento, donde se ve reflejada la infancia; en las fiestas patronales se ve la vida en general; las exequias que, claro, representan la partida de este mundo… En el Chocó son cantos totalmente originales donde se hace alusión a la Virgen y al niño con canciones como “Ay ve”, un canto donde Jesús es el principal protagonista…Allí el niño aprende a reconocer las deidades que guiarán su patrón de conducta en el resto de su vida, y a familiarizarse con los santos a los que se encomiendan a diario sus padres” (62). - 14Hablando del mestizaje en su libro Raza y Etnicidad en Latinoamérica (2000), Peter Wade define mestizaje como la mezcla sexual y espacial de los pueblos en las Américas entre españoles, criollos, indígenas y negros libres (38). Sin embargo, Wade también menciona que los afrodescendientes, “sufren exclusión cuando los blancos y mestizos los definen como más allá de los límites de una legítima nacionalidad, como no nacionales, distantes de los valores básicos que implica el ser blanco o mestizos (de color claro), urbanos, civilizados y con una educación formal” (103).